Niño ariqueño salió a la cancha del Camp Nou acompañando a Thomas Vermaelen
Su sueño hecho realidad, vivió Cristóbal Inzulza, un pequeño de 9 años, alumno del Cuarto Básico B del colegio San Jorge, al estar rodeado de las estrellas del Barcelona, en la goleado que el equipo culé le propinó al As Roma por 6 a 1 el día de ayer.
Un día, su padre Alonso Inzulza, en uno de sus trámites en un banco de la ciudad, fue informado de la posibilidad de que uno de sus hijos saliera a la cancha de la mano de un jugador de Barcelona, en el Camp Nou, en el partido de la Champion League, cuando enfrentaran al As Roma.
Entusiasta del fútbol, no lo pensó dos veces y decidió hacerle un regalo a su hijo Cristóbal, quien es un alumno con excelentes notas, y decidió viajar a Barcelona, acompañado de su esposa Andrea, y de sus hijos Cristóbal y Diego.
El viaje no estuvo exento de algunas dificultades típicas, como el atraso de cinco horas en el aeropuerto Jorge Chávez de Lima en abordar la combinación a Madrid. Este atraso significó perder la combinación Madrid-Barcelona, sin embargo, con optimismo y viviendo una aventura familiar, llegaron a la tierra del equipo culé.
Los nervios dominaban a este pequeño, hincha de Colo Colo, y desde ahora del Barcelona, esperando el día del partido.
“Me gusta el fútbol, juego de mediocampista por mi colegio San Jorge y también por el NAC. Conozco hartos jugadores. Para mi cumpleaños, varios del San Marcos me grabaron un video con saludos y varias veces, acompañando a mi papá a Santiago, nos hemos alojado en el mismo hotel donde se concentra Colo Colo y me he tomado fotos con todos ellos, que ya me conocen, porque varias veces hemos coincidido ahí”. Indicó Cristóbal.
Más adelante agrega: “Barcelona es muy lindo, mi bisabuela era catalana y será por eso que me identifico con el equipo. Es una ciudad muy cultural”.
“Yo estaba muy nervioso y no sabía que equipo me iba a tocar y con qué jugador iba a salir. Estaba muy emocionado al salir a la cancha, casi me desmayo. Me tocó salir con el 23, Thomas Vermaelen, un jugador belga que juega de defensa central. Al llegar al estadio junto con los otros niños, había un tremendo operativo de seguridad, para evitar que pudiera pasar algo. Mi mochila, que me había regalado el club, quedó en custodia hasta después del partido. Mi papá, mi mamá y mi hermano Diego se fueron después al estadio. Y llegó el momento que salimos. Era un estadio grande, uno de los más lindos que he visto – Cristóbal estuvo en el mundial de Brasil junto a su padre – y lleno…lo que más me impresionó fue el pasto, parejito”. Cuenta muy entusiasmado Cristobal.
“El partido fue espectacular. Barcelona le ganó 6 a 1 al equipo italiano. Estoy muy contento, le agradezco a mi papá el haberme traído junto a mi mamá y hermano para acá – dice a través del teléfono desde España – le mando muchos saludos a mis compañeros de curso del San Jorge y a mis amigos del equipo del NAC.”, dice muy emocionado.
Feliz se prepara para el viaje de regreso y continuar con las últimas clases, antes de las merecidas vacaciones de verano.