La joven, según manifiesta, tenía dos años, y al ser encontrada, fue trasladada a un hogar de acogida llamado “María Augusta”, institución inexistente en la actualidad, allí fue dada en adopción a los ciudadanos suecos Jan e Ivanka Krantz, quienes la llevaron a su país donde la criaron y en la actualidad estudia educación de párvulos en la universidad de Estocolmo.
En el video que adjuntamos, la joven difunde la menguada información con la que cuenta y que son algunas fotografías y algunos datos vagos de su lugar de adopción que captaron sus padres adoptivos.
Su preocupación es tratar de encontrar a sus padres biológicos para reencontrarse con sus orígenes. No le embarga ningún sentimiento de rencor hacia sus progenitores, solo quiere estar tranquila y vivir sin la inquietud de ignorar sus orígenes.
Quienes sepan algún antecedente al respecto, se pueden comunicar con Paula al correo
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